5 oct 2008

La noche no es azul, es amarilla

Vos no sos sal, sos azúcar. Vos no sos sol, sos nubes. Sos hielo cuando hace calor, cuando hace frío. Yo sólo soy frío cuando hay frío o a lo sumo palabras, que cuando se juntan con tus colores, se ven bien, saben bien, huelen bien pero son sentidos, y nada más. Sentidos sin sentido. Vos sos ♭.Yo soy \sharp. Da igual, porque lo que escribimos siempre es ♮. No sonamos. Yo nunca te diría cosas como estas,
"Amor desde la sombra desde el dolor amor te estoy llamando desde el pozo asfixiante del recuerdo sin nada que me sirva ni te espere. Te estoy llamando"
como dijo alguna vez Idea. Yo nunca me hubiese llamado Idea. Además no sé decirte cosas enteras. Sólo fragmentos, como éstos de Idea. Pero si pudiese decirte algo de lo que ella alguna vez escribió sería
"Estás solo, lo mismo. Ebrio, lúcido, azul, olvidado del alma, concédete a la hora".

18 mar 2008

Alta Suciedad

Hace apenas unos días sostuve una charla de esas que se dan contadas ocasiones y que no suelen olvidarse. En la charla, uno de los interlocutores mencionó –fugazmente- un concepto que me pareció brillante. Aquellas palabras -que él había soltado al aire así, muy suelto de cuerpo y que nada tenían que ver con lo medular de muestro diálogo- quedaron rebotando en mi cabeza.
‘Contaminación emocional’. Eso fue lo que dijo.
No fue hasta después de los besos y los típicos ‘no-te-pierdas/te-mando-mensaje’ que empecé a pensar un poco más esas palabras que tan bien habían sonado al pasar, y que mi cerebro había estado rumiando por un par de horitas sin resultado alguno.
Esas dos palabras juntas eran algo.
Y es tal cual... ‘contaminación emocional’; no lo podía haber dicho mejor, ni siquiera queriendo.
Prendés la tele: informativo amarillista, con voces en off tétricas y tomas aún peores de cualquier catástrofe. Y me aferro a la palabra catástrofe porque en los informativos hay que llenar espacio y los espacios no se llenan con hechos, sino con noticias, y las noticias, en este bendito siglo XXI no son tales si no son fuertes. Así, un choque de una Zanella contra una camioneta de reparto en la que viajan el papá y su niño se convierte en un siniestro en el que colapsaron espectacularmente un individuo en un vehículo birodado contra un auto en el que viajaban un adulto junto a su pequeño hijo.
En fin. Decía, prendés la tele, y ahí está. Ponés una película, escuchás una canción, mirás una foto en algún lado y la ves. Abrís el diario, y zácate, otra vez. Te tomás un bondi y está ahí, estoica. Te cruzás con alguien que empieza a contarte algo y ahí está de vuelta, volvés a ver lo mismo... ¿Qué onda? ¿Es que nos fuimos tan, tan a la mierda?
Resulta todo una odisea escaparle a esa sobrepoblación de estímulos que son como un misil teledirigido directamente a nuestro corazón, a nuestro estómago; el circo de las emociones está armado, no al lado, no en frente, sino alrededor nuestro. Y todos y cada uno de nosotros somos parte de él, consciente o inconscientemente.
No hablo de hipocresía ni de demagogia. Resulta absolutamente lógico y previsible el hecho de que se intente defender cada cosa, cada causa, con las armas que creamos más convenientes. Y es sabido que en el amor y en la guerra todo vale...(yo no estoy de acuerdo con esto último, pero es así, pasa). Y la de hoy es una guerra, una guerra de la imagen, en donde cada uno tiene que hacer lo que esté a su alcance por defender sus intereses.
Contaminación visual, sonora, ambiental; exceso de imágenes, exceso de ruido, de música, y de gente que habla, exceso de residuos, de basura, de mugre... excesos en un mundo que vive buscando el orgasmo permanente.
De tanto velar por la diferencia se vuelve exactamente al mismo lugar, al mismo lugar, al mismo lugar. Y es en esa cruzada por destacarse que las emociones se ven en el centro de la madeja.
Parece que todo lo que nos llega –ya sea por los medios o por el boca a boca- está teñido de emociones. Todo viene cubierto por un velo de sentimietos, digerido de antemano.
No podemos prender la radio sin que el conductor del periodístico trate –con la mejor intención de todas, ojo- de hacernos conscientes del horror que se vive en XX, en un tono paternal, sermoneador. No podemos contar algo sin caer en detalles tristes o macabramente curiosos, sin agregarle ese plus de subjetividad emocional. Claro que todo con la mejor intención, ojo y esto va sarcasmo aparte.
No es esto puntualmente lo que me inquieta, y ni siquiera se si ‘inquietar’ es el verbo que estoy buscando... nada, a lo que voy es al bombardeo sentimentaloide del que hablé al inicio, de la plétora de estímulos confeccionados para tocar nuestras fibras más humanas. Todo, o casi todo lo que nos llega nos llega con una parte emocional exacerbada quizás vanamente. Casi todo es mucho, y mucho termina confuindiéndose en la nada.Y la nada tiene –al menos para mi- algo que ver con el hecho de que un tipo se suba al ómibus que me tomé y hable y cuente susdesgracias y yo –sin desmerecer de modo alguno al tipo y pensando que es un horror lo que le pasa- me quedo ahí, impávida, y hasta quizás no le doy una moneda porque no tengo, porque ya di en el bondi anterior, o porque no tengo ganas y punto. Y lo mismo con los de los semáforos, y los que piden por la calle, y los nenitos que recorren los bares por la noche.
Basta. No está bueno que vengan a decirme con qué llorar y con que no, que es una tragedia y que no, a quién ayudar y a quién no. Eso lo decide cada uno. Punto. No va a haber mejores personas por insistir con la cursilería del corazón todo el tiempo, sin criterio. Gente a la que todo le da lo mismo hubo, hay y habrá siempre, y con la sobre genreación de estímulos lo único que se logra es aletargar más a esa ínfima parte de su ser que aún puede ser conmovida.
Hay tanto de lo mismo que es como si no hubiese nada. Hay empalague. Es animal, es humano acostumbrarse al paisaje en el que vivimos y seguir de largo. En términos de mercado, o económico vendría a ser algo así como que hay muchísima más oferta que demanda. Algo así como una crisis del ’29 de las emociones humanas.
Dios, acá la única en crisis soy yo; no puedo haber dicho semejante terrajada... ‘Crisis del ‘29’... Qué hija de puta.

10 feb 2008

Coda

El precio del amor es la finitud. Amamos porque nos morimos.
Ayer de madrugada pensé en eso.
Me sirvió.
Me va a servir.

22 dic 2007

1964

Hace siete besos que intento no pensar, hace diez acordes que intento escribir, y van a pasar dos canciones hasta que me arrepienta. Todo es permeable. Todo sube, todo baja. Baja el calor y sube el frío; el sol se moja y el viento seco me aleja cada vez más... Y mientras tanto, una voz me dice que van a volver los Julios de escarcha y los Eneros de arena, que se puede creer -y crear- un orden. Y quiero que esos besos sean ocho. Y no puedo darme cuenta si soy felíz usando tu campera en Diciembre, o si quiero ocho besos de alguien que use remera en Julio, con melodías diferentes entre sus manos. Cuatro notas me dicen que sí. Sonrío. Nueve notas me dicen que no. No me importa; hoy puedo contra eso y mucho más... hasta que llega un arpegio desgarrador. A veces pienso que el estómago es el más fiel de los termómetros del alma... La música no hace más que confirmármelo.Creo que hoy son seis las canciones que mueven mis visceras como un acordeón; sientos soles mojados y vientos secos y ninguno de los dos me molesta. Hace cuatro miradas que pienso que no, que definitivamente no. ----------- -'Nadie pierde (repites vanamente) Sino lo que no tiene y no ha tenido nunca, pero no basta ser valiente para aprender el arte del olvido. Un símbolo, una rosa, te desgarra Y te puede matar una guitarra'. -final del primer soneto de '1964', de J.L. BORGES-De los pocos poemas que me impactaron... porque no se puede jamás, jamás, escribir 'desgarra' y 'guitarra' tan juntos... El termómetro del alma otra vez ruge, cruje.

11 ago 2007

Péndulos.
De acá (.)
a acá (.)

Soy igual que todo.

Y es que la diferencia termian confundiéndose con la chatura.

No paro de oscilar; de un confín al otro, con cortes, quebradas y saltos... pero al final siempre oscilo. Cada sol es un nuevo zigzag que parece detenerse a medio día, hasta que llega la luna que mira callada y obliga a revolver. ¿Por qué será que cuesta tanto estacionarse?

Las personas somos péndulos. Focault, por ejemplo, tenía razón. No necesitamos fuerza motríz para ir de un lado a otro... y, después de todo, es evidente que no podemos permanecer iguales ante el movimiento de la tierra. Sí...definitivamente: las personas somos péndulos de carne y hueso. Bueno... es cierto que existen personas de metal, pero eso ahora no me importa.

Mover, remover, hundirse, perderse y volver a salir son una constante en la vida de una persona. Y es natural que así sea, y hasta productivo, y hasta funcionalsano, y hasta...y hasta... Basta.

A veces cansa.

El escepticismo mata al hombre. Y a las nenas.
Hay laberitnos que más vale ni siquiera recorrer... Cansa. Cansan.
Hoy, por ejemplo, haría varias cosas a cambio de que alguien me firme un papel diciendo que el blanco es blanco y que todos los gatos tienen cuatro patas. Nada de ese cuento que los esquimales distinguen 40 blancos diferentes y que hay gatos mancos.Nada de oscilaciones. Hoy no.
Para un lado y para el otro, cómo un péndulo; las certezas se convierten en dudas, que con el tiempo se metamorfosean en nuevas certezas que contienen la semilla de su propia destrucción. Los laberintos parecen calesitas y las calesitas marean, y aburren. Me aburrí. Canti que me bajo en la que viene.
Sueño que pienso cosas que no son anomálicas. Que creo en la redención. Que Jesús resucitó a los 3 días, y que murió con 33 años...y que eran 33 los Orientales que desembarcaron. Sí...tienen que ser 33.
Quiero que el negro sea negro, porque encontrar siempre los grises duele.

1 feb 2007

El mundo está lleno de ‘haches’…
Y la ‘hache’, muy a pesar de lo que aseveran varios,….es vana e inútil. El mundo está lleno de ‘haches’ sí, pero no sólo en el diccionario, en la revista del corazón que vichamos al paso, enchufados, camino a la facultad…Hay ‘haches’ en los carteles, en los catálogos de ofertas im-per-di-bles, en la cartita que dejamos para avisar que vamos a llegar tarde porque nos fuimos a lo de aquél… Perdón, hay haches en el sms,..Lo de la cartita se me escapó…perdónen el arrebato obsoleto y demodé…no va a volver a pasar…
Escribimos con las ‘haches’, porque eso es lo que nos enseñaron…porque es como tiene que ser…Al fin y al cabo, los años de dictados non-stop de la escuela no pasan en vano. Y pobre del que, en sus ya mozos años de adolescencia no haya apre(he)ndido, justamente, a escribir ‘haya’, y peque con un ‘alla’, ‘aya’, o el tan bestial como corriente ‘hiba’. A nadie se le cruza por la cabeza prescindir de esa letrita…O capaz que sí, pero no creo que supere los límites de una correspondencia informal, efímera,(en papel, virtual o celulítica)…Me juego la cabeza a que no hay ni un “multi-loco”, idnie-under, que se haya animado a mandar su CV diciendo que se llama Oracio. Ná. Pero, hete aquí que si el mismo (H)Oracio, “multi-loco”, indie-under, se cruza en una reunión social con algún (h)ombre que, o(h) casualidad, justo anda buscando un señorito como (H)Oracio para emplear en su brand new Pymes*, y le pregunta cómo se llama y dónde vive y algo más….y nuestro protagonista respondiese que se llama (H)Oracio, y que vive en la calle Las (H)Eras….Y se entendrían. Y todos felices. Y capaz que hasta conseguiría el laburo…o no…Pero bueno, esto ya pertenecería a otro capítulo, de otra historia, de otro post (¿?)…Nah, don’t panic…No creo que Oracio merezca un post exclusivo. Si la hache no se escucha, ni siquiera se menciona en las conversaciones,…si lo que importa cuando conocés a alguien son los ojos, la boca y más que nada el cerebrillo,…¿para que caranchos, después, tenemos que adornar el papel y los pensamientos con adiciones estúpidas, que nos vienen, nada más y nada menos de la tradición de añejos usos y costumbres, …de cosas que nos enseñaron a mirar de una única, unidireccional y monocorde manera? La usanza, lo que le dicen, decimos. El punto (si es que de verdad tenía uno cuando empecé a teclear…) es que la vida está llena de cosas tan absurdas pero aparentemente necesarias como la hache…. Cosas que, muchísimas veces, ni siquiera pensamos en descartar de nuestra diaria…No voy a empezar a enumerar porque podría estar un buen rato, y aparte es relativo; cada uno sabrá qué le sobra y qué no…Material o inmaterial, animado o inanimado..tenga la forma o el color que tenga,..son varias las cosas de que podríamos descartar,..o por lo menos podríamos reflexionar acerca de su (in)utilidad respecto a nuestra vida, pero, como la reglamentadísima y vestusta ‘h’, aceptamos, respetamos y perpetuamos sin más. Muchas cosas pueden ser ‘haches’. Muchas causas defendidas por banderas son ‘haches’. Muchas actitudes y hábitos también pueden ser ‘haches’…gestos, maneras, palabras, tonos de voz de algunos para con muchos que ya están legitimados…¿porqué? Ni idea. Figúrense que si estoy aca,…divagando acerca del uso –real y metafórico- de la ‘h’ no me da la azotea para esbozar un breve esquema de la aceptación del destrato cada vez más sutil como innecesario y prescindible que se reproduce a la velocidad de la luz en la sociedad occidental contemporánea. Y aunque quisiera tampoco podría, porque, al igual que lo que me pasa cada vez que uso la ‘h’….es algo que tengo tan interiorizado, algo a lo que estoy taaaan acostumbrada, que, cómo buen animal social que soy, como buena ovejita mortal en este puto gran, gran rebaño en el que canto, bailo, salto, lloro y me divierto no podría erradicar de mi modus operandi. Uso la ‘h’ aunque sé que es al pedo;..digo algunas cosas bastante ‘h’ –que evidentemente, son comentarios al pedo…Ah, y también, dos por tres me compro cosas ‘h’. *** Lo que me preocupa un poquitín bastante, es cómo cada vez nutrimos la propagación de los elementos ‘h’ en el mundo. *** y por más que pienso, no se me ocurren cosas para hacer…O capaz que sí, pero de las que aparecen en mi cabeza (con onomatopeya ‘pop!’ mediante, claro) quedan ahí, juntando polvo en algún estante de la cisura de Rolando o la de Silvio…porque sencillamente, me cuesta luchar contra las cosas ‘h’, las cosas aceptadas, legitimizadas pero inútiles, El mundo está lleno de ‘haches’….y este post también. Mecachoendié… *=nunca va a dejar de darme gracia la sigla “Pymes”,…Bah,…capaz que si escucho decir “Pymes” después de “PANES”, me reiría un poco menos… Ay Marinita, Marinita, tan ateíta, ateíta, …no pintó cranear otro nombre para tu plan?
Ah,..y por favor, si alguien de apellido Hache llega a leer esto, que no se me ofenda,..no es nada personal...Ud. Sr./Sra. Hache no tiene la culpa de que su apellido sea feo. Peor es Tellechea, por ejemplo. Ánimo! Además, no existen las personas 'h',...solamente sus actitudes pueden ser 'h' así que no decaiga...

20 dic 2006

Escapism: "The tendency to escape from daily reality or routine by indulging daydreaming, fantasy or entretainment". * * * * * * ...asi que nada, es eso nomas, tan en bruto como suena...no hay que darle mucha vuelta ni tampoco tratar de maquillar las verdaderas intenciones de las cosas. Le necesidad de catapultarme (en un sentido absolutamente literal del termino) era inminente,... por fin pudo. Kilometros para caminar, horas y horas de canciones para componer una banda sonora que va a quedar grabada a fuego, gastos en los que escatimar, bufandas para desenrrollar, varias tazas de café para las tertulias con o sin interlocutores. Bastante para extranar. Demasiado para ver, demasiado elevado a la "n" para pensar. Todavia no encontre la formula para meterme adentro de una caricatura de Quino (crà!), en donde hay una mano gigante que dibuja botones de "on/off" en un grupito de personas... Por mas mediocre que suene, a veces me gustaria no pensar...Pero no tengo el off. Ni tampoco la sabiduria pqrq saber cuando el humito que sale de la azotea es producto de la produccion de La Gran Maquina de Hacer Ideas o de pura telarana en el engranaje. Fermentacion o mera voràgine; that's the question... * * * * * * La voluntad, casi vomitada, de alejarme para poder mirar desde otro angulo un Montevideo que adoro pero que tambien ahoga, para poder aprender a extranarlo. Uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, dicen...Pues a mi no me pasa exactamente eso...Sé algunas cosas: sé lo que tengo, y cuanto de eso es incondicional y cuanto es perecedero o implosionable..., sé a quienes quiero y quienes me quieren, sé que musica me gusta, y lo que es mejor todavia...sé que hay mucho que no sé qué es pero que me va a gustar, sé cual es mi color preferido, mi olor preferido, mi dia preferido, mi director preferido, mi villano preferido. Sé que puedo y debo rendir mcho màs. Sé que tropecé 7 veces con la misma piedra, pero también sé que esa puta roquita se cruzo en mi camino otras tantas. que me encanta vivir, y también me encanta cantar en la ducha al dia siguiente de no querer ver ni a la sombra del vecino que todavia ni llego a su casa. Sé que quise mucho, sé que ahora quiero un poquito y no deberia, ...y también sé que a las Merienda Sote las hacen un milimetro mas chiquitas cada 365 dias, y que no es una cuestion de que parecian mas grandes cuando eramos chiquitos. Todavia no sé muy bien quien soy, pero si estoy convencido acerca de quien no quiero ser. Sé que muchas de las cosas que creo saber son tan efimeras como un chispazo de inspiracion. Viviendo se termina sabiendo bien qué queda y qué se escurre... qué mejor que pararse lejos de un cuadro para descubrir que al final esa mancha amorfa, o esos puntitos infimos forman un todo armonico? Creo que en ese sentido algunos cuadros se parecen a la vida. Aca estoy, parandome un poquito lejos...viendo como de a poco los divagues de colores se alinean; preparando mis pulmones para la bocanada de aire que esta por llegar... Ya llega, ya llega....